Cuidado con los visitantes bajo vuestras estructuras

Saber si hay visitantes viviendo bajo vuestra terraza o cobertizo

Será más fácil detectar si los animales se infiltran si vuestras instalaciones están cerca del suelo. Harán destrozos en el terreno para acceder al lugar deseado: pisotearán el césped, moverán el mantillo o simplemente harán agujeros. Un truco recomendado para saber si el agujero está activo es llenarlo de tierra para taparlo. Si realmente hay visitantes viviendo allí, volverán a cavar para entrar en su escondite, lo que os permitirá detectar su presencia.

Si vuestra terraza o cobertizo está elevada, los animales podrán moverse libremente sin dejar señales visibles de su presencia, lo que complica la situación. Sin embargo, podéis colocar una lona de plástico o tablas de madera alrededor de la instalación durante unos días. Si un animal ha ocupado ese espacio, rasgará el plástico o moverá las tablas para desplazarse a su antojo. Instalar cámaras de vigilancia con detección de movimiento también es una excelente manera de observar la actividad alrededor de vuestra casa.

Cómo deshacerse de ellos

Los repelentes rara vez resultan eficaces contra los animales. Además de tener que aplicarlos con frecuencia según el clima, la mayoría de las especies son insensibles a este tipo de productos. Tapar el agujero con piedras o colocar bolas de naftalina en la madriguera tampoco sirve para ahuyentarlos. No os recomendamos reubicar por vuestra cuenta a los intrusos que rondan por vuestro terreno, por razones tanto éticas como sanitarias.

El sistema de extrusión puede ser una buena forma de cerrar la entrada de una madriguera. Consiste en instalar una puerta unidireccional que permita al animal salir con normalidad, pero le impida volver a entrar, lo que le obligará a buscar otro refugio por sí mismo. Evidentemente, recurrir a un profesional siempre es una opción segura y fiable.

Prevenir eficazmente su visita

La prevención es, sin duda, el elemento clave para evitar la presencia de visitantes indeseados. Si preparáis el terreno adecuadamente, será mucho menos probable que pequeños animales se acerquen a vuestra casa.

El consejo más eficaz es colocar una malla metálica alrededor de la base del cobertizo o de la terraza. Es fundamental que la malla se entierre en el suelo y tenga una extensión hacia el exterior, de modo que los animales no puedan excavar ni pasar por debajo de la barrera. La foto siguiente muestra un ejemplo de este tipo de instalación.

Es importante destacar que no debéis hacer que la estructura toque el suelo, ya que esto podría dañarla debido al movimiento del terreno causado por las heladas y el deshielo. Aseguraos de dejar unos 15 cm entre el suelo y la estructura e instalad una malla flexible para evitar cualquier daño.

¡Gracias nuevamente a Bédard Gestión Parasitaria y Depredación inc. por su colaboración!